La Confederación Nacional del Trabajo (CNT) quiere mostrar su solidaridad de clase con los trabajadores de la empresa Tenneco (amortiguadores Monroe) de Gijón que van a ser despedidos y les ofrece su apoyo en las luchas que lleven a cabo en defensa de su puesto de trabajo.
La reorganización de la empresa, no por motivos económicos como inicialmente decían, no debe recaer una vez más sobre los trabajadores. La clase obrera asturiana ha de luchar para defender sus conquistas sociales y laborales. Los cantos de sirena ya empiezan a sonar en forma de indemnizaciones, bajas incentivadas, etc. En medio, políticos que sólo buscan medrar pero que a la hora de la verdad dirán que no depende de ellos, y que hay que aceptar ese cierre.
Ninguno de ellos propondrá que los empresarios cedan la propiedad de las fábricas a los trabajadores para que la gestionen por sí mismos, como se está haciendo con éxito en otros lugares como Italia y Grecia. La planta de Tenneco en Gijón es la más eficiente y productiva de la empresa, pese a ello quieren cerrarla. La tecnología se ha desarrollado con jugosas subvenciones públicas, y ahora quieren llevarse las máquinas (y la tecnología) a otros países. Y los trabajadores que se vayan a la calle por cuatro perras. Perras que cada vez son menos gracias a las reformas laborales de esos mismos políticos que ahora quieren salir en la foto.
No cejéis en la lucha compañeros, es la única solución a nuestros problemas. No os dejéis engañar por esos políticos, ni tampoco por los sindicatos mayoritarios que a vuestras espaldas negocian con la empresa el cierre. Como trabajadores en asamblea la capacidad de decisión es vuestra y no de delegados sindicales, que hoy dicen defenderos y en sus propias casas aplican ERES y reformas laborales a sus trabajadores para luego, hipócritamente, criticarlos en la calle y mantener así su buena imagen.
La lucha obrera y la solidaridad de clase es la única forma de evitar que nos dejen sin futuro. ¡Que nadie decida por vosotros!