El movimiento 15M quiere hacer despertar a la sociedad española del largo letargo en que se halla sumida, habiendo depositado inocentemente su confianza en partidos políticos y sindicatos que solo trabajan para sus intereses y los de las clases dominantes, ahora miles de personas han decidido libremente crear sus propios espacios para hacer política de manera horizontal, local y sin jerarquías, espacios de debate y construcción en común basados en los principios del asamblearismo y la acción directa, acción directa que se ha empezado a aplicar a la vida cotidiana, por ejemplo, solidarizándose con las personas que se ven obligadas a dejar sus hogares, actuando de frente y de manera contundente contra cualquier desalojo de vivienda, injusto de por si y más en un país donde nuestra constitución habla del derecho a una vivienda digna.
La CNT sólo puede alegrarse ante un movimiento que comparte nuestros principios de horizontalidad, asamblearismo, negativa a la colaboración con el sistema imperante, organización de abajo a arriba, sin jerarquías, sin políticos ni sindicalistas profesionales; larga es la travesía en el desierto que llevamos recorriendo, desde que muerto el dictador nos negamos a participar en el sistema sindical de las subvenciones, los comités de empresa, los liberados… siempre intentando organizar los centros de trabajo en torno a la asamblea de trabajadores, al margen de cúpulas y de dirigentes.
Ya es hora de llevar el espíritu del 15M a las fábricas, a las oficinas, a los talleres, a las empresas donde día tras día damos lo mejor de nosotros para recibir un mísero salario con el que pagar las deudas de los ricos, los vividores, los que, en teoría, tendrían que solucionar nuestros problemas en vez de creárnoslos.
No nos debemos de conformar con pequeños parches al sistema político-social actual, si el sistema no funciona las reformas no sirven para nada; debemos de ir más allá, transformar esta sociedad, hacerla más justa, más igualitaria, más solidaria; pero el único camino para conseguirlo es el de la democracia directa, el de la participación, el de la autogestión, el del apoyo mutuo, el de la implicación consciente.
Compañeros, unámonos, el espíritu del 15-M ha de extenderse a todos los ámbitos de nuestra vida, conquistemos la calle y conquistemos el tajo.
Sublime,
Ta guapo el comentario pero non veo que digais nada reciente sobre la mani del 15o en Mieres,los comunistas ya han corrido a apoyarla y yo creo que desde las filas anarcosindicalistas se deberia apoyar tambien publicamente y participar en las asambleas antes que los aprovechados de siempre acaben con uno de los movimientos mas esperanzadores y cercanos a la idea